¨La tendencia global es prohibir o regular el uso del celular en las aulas debido a la atención que se presta en clase. Se está viendo que a los chicos les cuesta concentrarse y que todos les aburre, esto sucede gracias a las pantallas y la información inmediata en redes sociales, son cerebro tecnoadictos¨
¨No podemos negar que la tecnología tiene un potencial enorme para transformar la educación. Además, se puede personalizar según el proceso de cada alumno¨
¨Se necesita trabajar con un mejor vínculo con el docente, que la clase sea interesante, un buen manejo en el aula y por supuesto la regulación del celular en los chicos. Esto último es difícil, ya que se necesita mucho tiempo de trabajo. Muchas instituciones, países y provincias decidieron prohibir regular y los resultados son muy buenos. Es una pena porque la tecnología es una gran herramienta de trabajo, pero también hace que los chicos se desconcentran fácilmente¨
¨El docente debe adaptarse a esta nueva generación y dejar de dar clases como ellos aprendieron, ese mundo ya no existe. Los estímulos tecnológicos te cambian completamente la cabeza¨