“El slow dating es una forma de conectarse cara a cara con las personas. Las aplicaciones de citas comenzaron a centrarse únicamente en la necesidad de tener sexo, lo que llevó a un gran vacío, donde las personas empezaron a sentirse solas y a depender más de un "me gusta" o un "fueguito"."
“Hay una generación que busca una relación más romántica, donde haya cosas en común y se pueda charlar. A través de estas aplicaciones, construimos una imagen idealizada de lo que nos gustaría que fuera nuestra pareja y, en realidad, lo que uno idealiza es lo que uno quiere. Cuando ocurre el encuentro, esa imagen no existe. Hay mucha gente que dice cosas que no son reales.”
“La generación Z empieza a desconectarse de las aplicaciones y comienza a conocer gente en gimnasios, cumpleaños y otros eventos, ya que necesitan conectarse y tener un vínculo más genuino. Muchas personas no pueden tener relaciones sexuales sin un vínculo emocional.”
“Muchos hombres y mujeres necesitan una conexión emocional con la otra persona. Esto no significa ser pareja, sino tener cosas en común. Las aplicaciones de citas, con la gran variedad de personas que ofrecen, hacen que uno no tenga tiempo para conocer a tantas personas. La gente quiere desconectarse de estas aplicaciones y conectar cara a cara.”
“En las aplicaciones, la experiencia es vacía. Cuanto más vacío me siento, mayor es la necesidad de llenar ese vacío. Se entra en un círculo que genera mucha ansiedad y estrés.”
“Esta generación busca la conexión emocional. Una persona con la que solo escribo y no hablo, no es alguien con quien pueda tener algo en común.”