La clásica máquina que definió al acid se suma a los clones virtuales de la compañía.
Roland añadió el TB-303 –el icónico sonido del acid- a su sistema de suscripciones Roland Cloud. La recreación virtual del famoso sintetizador presenta el mismo diseño ya la misma interfaz que la versión hardware, utilizando la tecnología ACB de Roland para generar los sonidos, similar a las versiones plug in de Juno-106, Jupiter-8 y otros de su Legendary Series.
Además del clásico sonido acid, Roland agregó nuevas características, incluidos cinco modos diferentes para el secuenciador, con una vista expandida, memoria extra y algunas nuevas opciones de efectos como “Drive” y “Delay”.
Roland Cloud cuesta unos 20 dólares al mes y puedes ver todo el catálogo disponible aquí.